Comedia

Antoine tiene cuarenta años. Felizmente casado con una mujer a la que ama, padre de dos hermosos hijos, un abogado brillante, se podría decir que ha logrado un éxito en su vida. Pero un día Antoine tiene un encuentro inesperado, irracional y trascendental. Uno que también es un poco escandaloso. Antoine encuentra a Dios, algo que simplemente no esperaba. De nada ! Tampoco su esposa.Se trata de una película alegre a pesar de su temática: seguimos a un hombre de mediana edad, casado y con hijos, a través de su vida cotidiana (problemas con su hijo adolescente, conflictos con su hermano perdedor interpretado por Benjamin Biolay, su relación con su padre... ) mientras redescubre por casualidad la religión y la fe católica. La parte más interesante son las reacciones tanto del hombre como de su entorno ante este fenómeno. Si bien no es una obra maestra, es una película bonita, los actores son buenos y la temática es bastante original. También te ríes un poco en el medio y la última reunión del grupo tiene momentos veraces. Creo que la película plantea preguntas interesantes sobre lo que la religión puede aportar y cómo se puede ver a las personas religiosas en la sociedad francesa y podría interesar tanto a creyentes como a no creyentes.

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