La Corte Constitucional sigue en ‘el ojo del huracán’ por cuenta de la ponencia del magistrado Alejandro Linares para permitir el aborto libre en los primeros 4 meses de gestación. La doctora en Derecho Constitucional Natalia Bernal insiste en que el togado actúa de manera ilegal al no responder a la solicitud de suspensión de abortos “legales” en su demanda, que busca la prohibición total de este delito en Colombia, y que no valoró íntegramente las pruebas presentadas. La mayoría de colombianos y al menos 300 organizaciones Provida y por la Familia, nacionales e internacionales, rechazan categóricamente la pena de muerte para los más inocentes.
La doctora en Derecho Constitucional de la Universidad de Sorbona de París, investigadora y autora de varias publicaciones en Europa sobre el derecho a la información frente al aborto, había recusado tres veces al magistrado Linares y pedido la nulidad del proyecto de la ponencia que liberalizaría aún más el delito del aborto. El país entero está a la expectativa del fallo, que podría decidirse la próxima semana.
“El ponente está vulnerando las garantías del debido proceso, congruencia e imparcialidad. Es ilegal lo que hace, porque los jueces deben pronunciarse sobre lo que los demandantes piden, y en este caso el magistrado no está resolviendo mi solicitud, sino que se aprovecha de mi demanda para hacer algo totalmente diferente. Tendría que enfocarse en verificar las razones que expongo, y no extralimitarse. No está valorando las pruebas que presenté”, afirma Bernal.
La abogada colombiana demandó el año pasado el artículo que tipifica el delito del aborto para que se reversara su despenalización “parcial”, efectuada en 2006, prohibiendo su práctica en todo el país por los comprobados daños a la salud de la mujer, además del cruel asesinato de los bebés en gestación. Por eso, también interpuso una acción de inconstitucionalidad contra los artículos del Código Civil que establecen que solo el bebé nacido tiene derechos, cuando “el niño por nacer merece igualdad ante la ley, como el derecho a la intimidad de su formación en el vientre materno”.
Desde la admisión de ambas demandas (con los expedientes 13225 y 13255), en julio del año pasado, y con el posterior revuelo mediático que puso la lupa en la pretensión de Linares de dar luz verde al aborto libre en las primeras 12 semanas de gestación -ahora serían 16-, diferentes grupos Provida respaldaron el objetivo de la Dra. Bernal, haciendo llegar más de 3 mil firmas a la Corte, testimonios, certificados de miles de casos de mujeres afectadas por haber abortado, etc.
El debate público del aborto se agudizó en octubre por cuenta de la reglamentación del Ministerio de Salud, ordenada en otra sentencia de la Corte, cuyo borrador generaba la criminalización de iniciativas como 40 Días por la Vida y de cualquier persona que aconseje a una mujer para que desista de abortar. El Gobierno Nacional insiste en reglamentar algo que no le corresponde.
La gota que rebosó la copa fue el asesinato de JuanSe, el bebé de 7 meses de gestación abortado en Profamilia, que pasó por encima del clamor del payanés Juan Pablo Medina para que le respetaran la vida a su hijo. Esto generó una ola de indignación entre los colombianos contra el aborto, quienes están saliendo a las calles a manifestarse, mientras la bancada Provida del Congreso discutirá la propuesta de convocar a un referendo para rechazar definitivamente este crimen.
R+F habló con la Dra. Bernal sobre las implicaciones de la decisión que podría tomar próximamente la Corte y las pruebas que envió a cada uno de los 9 magistrados.
– La Corte le negó la audiencia pública, también las medidas cautelares para prohibir el aborto en los hospitales y clínicas del país y todas sus recusaciones. Se sabe que solo una minoría de la Sala Plena rechazaría de entrada la ponencia del magistrado Linares. ¿Qué puede decir ante la tiranía y el autoritarismo del alto tribunal?
Natalia Bernal (NB): Cuando el aborto es escondido, el aborto es tolerado, así lo dice un centro de reforma de leyes y bioética norteamericano y coincido completamente. Quienes defienden el aborto desconocen el acto de extrema barbarie de acabar con la vida de un ser humano inocente.
Ante las evidencias presentadas, los magistrados son responsables por los graves daños del aborto que sigan ocurriendo. Sería una injusticia que estas pruebas quedaran escondidas.
Muchas mujeres podrían demandar al Estado por no ser avisadas del riesgo de la afectación a su salud mental o física. Muchas veces ellas no son informadas de lo que les pueda pasar, o son presionadas, manipuladas y hasta obligadas a abortar. Incluso el sistema de salud no es tan responsable como la rama judicial, porque esta es la que ordena y tolera el aborto. Esta es una oportunidad para que la Corte sea un ejemplo de paz al prohibir totalmente el aborto, reconociendo los derechos de los niños por nacer.
– ¿Cuáles fueron las principales evidencias enviadas a la Corte sobre el sufrimiento de los bebés? Diversas publicaciones en medios masivos han intentado deslegitimar su investigación, poniendo en duda la rigurosidad científica…
NB: Los dolores fetales los certificaron varios médicos neonatólogos colombianos. Aporté el estudio de la Dra. Maureen Condic, experta en embriología, quien intervino ante el Congreso de EE. UU. sobre la vida humana desde la concepción, demostrando cómo a la par de los latidos del corazón del bebé comienza a desarrollarse su aparato sensorial y este siente dolor desde la semana 8 de gestación.
Las principales pruebas son los propios métodos abortivos y la existencia de bebés sobrevivientes al aborto, luego destrozados por el médico. Envié videos de bebés de 8 y 13 semanas, recién abortados y todavía moviéndose, así como de quienes nacieron prematuros extremos desde la semana 22 y lograron vivir fuera del útero.
En cuanto a la extrema crueldad de los diferentes métodos, informé a la Corte sobre el doble trauma que genera a la madre, por ejemplo, el uso de pastillas para abortar, porque en el centro de salud no le explican que va a expulsar a una persona -su propio hijo- y la engañan con que tendrá un simple sangrado, cuando en realidad tendrá fuertes hemorragias, desgarres y dolores, también emocionales. ¡Vidas humanas que terminan en las cañerías!
Ni qué decir de los métodos en edades gestacionales más avanzadas como la aspiración, que mutila al bebé; la dilatación y evacuación, que se efectúa por desmembramiento; los infanticidios que está ordenando la Corte, inyectándoles digoxina intra-amniótica o cloruro de potasio en el corazón para producir paros cardíacos, además de quemaduras… los expertos explican que los vasos sanguíneos del bebé explotan. Luego inducen el parto, y si el pequeño sigue vivo, lo torturan para que muera.
Algunos logran sobrevivir, pero de estos muchos quedan con discapacidad como parálisis cerebral.
– Quienes promueven el aborto como “derecho” de la mujer desconocen las graves consecuencias para la salud, y vuelven a poner en tela de juicio la validez de sus aportes. ¿Qué les responde?
NB: Tan solo 13 psicólogos y dos psiquiatras certificaron 5 mil 700 víctimas de abortos legales en salud mental en Colombia. Por ejemplo, el psicólogo Octavio Escobar encuestó a cerca de 3 mil mujeres, constatando las afectaciones, y la Fundación Derecho a Nacer ha atendido al menos a 600 mujeres que abortaron. Más de 10 mujeres me buscaron y enviaron sus testimonios por escrito a la Corte.
Estos miles de casos corroboraron los estudios de expertos como la psiquiatra española Carmen Gómez Lavín, a quien entrevisté para mis libros, o el estadounidense Vincent M. Rue, sobre factores de riesgo en esas mujeres al suicidio, el consumo de drogas, la depresión o los ataques de pánico por sentimientos de culpa, pues cuando se arrepienten en algún momento de sus vidas no lo pueden decir, y no piden apoyo por miedo a ser juzgadas. De esto habla la psicoterapeuta Theresa Burke en su libro “Duelo prohibido”, quien fundó los retiros de sanación postaborto Los viñedos de Raquel.
En cuanto a la salud física, las estadísticas del Ministerio de Salud que solicité también evidencian los casos de hemorragias, embolias, perforaciones uterinas, infecciones genitales y pélvicas entre 2009 y 2017, ¡más de 7 mil mujeres perjudicadas en su cuerpo por abortos legales, incluyendo a las fallecidas!
– Todo lo que usted describe, soportado en videos y fotos que envió a la Corte, hace razonable su planteamiento de que el aborto es un auténtico genocidio. Entidades abortistas como Profamilia y Oriéntame certifican al menos 150 mil abortos “legales” desde 2006…
NB: Colombia suscribió la Convención para la Prevención y la Sanción del delito de Genocidio, que establece que impedir el nacimiento a una categoría de personas constituye genocidio, y acá se está impidiendo el nacimiento de los niños concebidos por violación o con alguna discapacidad, así como de los hijos de mujeres con dificultades de salud física o mental. Es más, lo que hacen en las clínicas es muy parecido a lo que hacían en la Alemania Nazi, en la forma como eliminan a seres humanos.
*Imagen principal: galería realizada con fotos reales de bebés abortados en Colombia. Aquí puedes ver la nota completa con las imágenes de los bebés víctimas de la Corte Constitucional.
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¿Qué puedes hacer YA para ayudar a salvar vidas del aborto?
-Participa este sábado 22 de febrero en la “Marcha Nacional por el fin del aborto en Colombia”.
-Firma la alerta: ¿Colombia un País Genocida? 150.000 bebes abortados ¡Renuncien Magistrados!
-Sigue la plataforma Unidos por la Vida y entérate de campañas en redes y marchas:
-Únete a la décima vigilia de oración de 40 Días por la Vida, que inicia el 26 de febrero:
