El seminario teológico presbiteriano de La Unión, en Nueva York (Estados Unidos), realizó en su capilla una ceremonia de confesión(*), mostrándole a las plantas su arrepentimiento y haciéndole ofrendas a estos «seres que nos sostienen, y cuyos dones no somos capaces de retribuir».
Today in chapel, we confessed to plants. Together, we held our grief, joy, regret, hope, guilt and sorrow in prayer; offering them to the beings who sustain us but whose gift we too often fail to honor.
— Union Seminary (@UnionSeminary) September 17, 2019
What do you confess to the plants in your life? pic.twitter.com/tEs3Vm8oU4
La ceremonia fue dirigida por el «teólogo activista» Claudio Carvalhaes (@ccarvalhaes), como parte de la clase «Extractivismo: una respuesta litúrgica ritual», orientada a hacer «oración comunitaria para confesar el daño hecho a las plantas a través de la comunicación directa del arrepentimiento«.
Haciendo una referencia al Génesis, el seminario explicó que las teologías que han enseñado que el hombre está llamado a dominar la Tierra son responsables de la degradación de la Creación.
Por esa razón están promoviendo el nacimiento de una nueva teología y una nueva liturgia que pueda sanar y sembrar en lugar de aquellas que destruyen y arrancan.
Este tipo de iniciativas que divinizan la naturaleza, o que la ponen en el centro de la liturgia, coincide coincide con la preocupación generada entre los fieles católicos, por la promoción de herejías semejantes, en nombre de la defensa de la Creación y de un «ambientalismo católico», que serán discutidas en el próximo Sínodo de la Amazonia.
* Nuestros lectores nos señalan que los presbiterianos con creen en el sacramento de la confesión, por lo cual la ceremonia que realizan no puede asemejarse al sacramento católico de la confesión, sino a un acto de arrepentimiento y oración.
