Según la demanda presentada contra una clínica de fertilidad In Vitro en Estados Unidos, una pareja de Nueva Jersey invirtió casi 1500 millones de pesos para tener un hijo biológico en 2012.
Seis años después, y ante las constantes dudas e incertidumbres, se hicieron una prueba de ADN, según la cual el padre no tiene vínculo biológico con la niña, la cual tiene rasgos asiáticos mientras que sus padres son caucásicos.
El supuesto padre «in vitro», Drew Wasilewski, explicó al New York Post que los últimos cuatro años de su vida ha sido una «pesadilla» en la cual se ha cuestionado todo, incluso a su esposa, y pasó por todo tipo de emociones que no sabía como manejar.
La clínica está investigando cuál de sus donantes puede ser el padre de la niña, al tiempo que intentan establecer si el semen del señor Wasilewski fue utilizado para procrear otro bebé.
«Los niños quieren saber de dónde provienen. Yo creo que soy una muy buena persona. Quisiera que sepa quién soy como persona, que sepan de mí tanto como yo supe de mi papá y mi mamá», dijo el señor Wasilewski en relación con la posibilidad de tener contacto con un hipotético hijo suyo, así como el que quiere que su hija tenga con el padre biológico, de llegar a ser identificado.