En entrevista dada el pasado domingo a El País de Cali, el músico bonaverense relató lo que habría sido una experiencia sobrenatural, cuando debido a un accidente al caer de una tarima estuvo al borde de la muerte y habría podido tener un diálogo con Dios:
«tuve una experiencia con Dios muy especial donde Él me dice: ´Cada vez que respiramos yo te presto la vida, yo te la doy, estoy en cada gota del mar, en cada movimiento´. Uno empieza a valorar cada instante de vida y a creer que estamos aquí para entregar ese cariño que Él nos presta», narró el músico al diario caleño.
Esta visión del músico vallecaucano muestra a un Dios muy cercano a sus hijos, atento a cada uno de sus acontecimientos, recordándoles la frase de San Pablo cuando dice «por más que no se encuentra lejos de cada uno de nosotros; pues en él vivimos, nos movemos y existimos» (Hch 17, 26-28), o la frase de Jesús en San Lucas: «¿No se venden cinco pájaros por dos céntimos? Pues ni de uno solo se olvida Dios. Más aún, hasta los cabellos de vuestra cabeza están contados. No tengáis miedo: valéis más que muchos pájaros» Lucas 12, 6-7.
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Buenaventura, quien es hijo de un exseminarista jesuita de Chocó y una exmonja carmelita de clausura de Caldas, también contó cómo en su juventud vivió muy lejos de Dios, a quien cuestionaba incluso en sus canciones como en «¿Dónde estás?», en la que dice: «Dios de los hombres dónde estás, Dios obrero, Dios desempleado, Dios del pobre, Dios del triste, Dios mío dónde estás».
Esta época coincidió con los inicios de su carrera musical en París durante la cual debió pasar algún tiempo viviendo en la calle en donde fue maltratado y a duras penas conseguía para comer. Eso hizo que se peleara con Dios, y se quejara diciéndole: «no me arrastres así».
El artista reconoce que durante ese tiempo en lugar de entregar esa lucha a Dios, la llevaba sobre sus hombros y eso hizo que se cansara, e intentara suicidarse lanzándose al río Sena.
También contó que fue tentado en tres ocasiones por alguien con «energías nefastas» para hacer un pacto que le daría fama, dinero y poder, pero que él nunca aceptó, respondiendo: «prefiero estar en Cali, en la Topa Tolondra o en Zaperoco tocando y no ser famoso o no tener ninguna resonancia, pero no hago pacto con usted».
Imagen: Caracol TV.