Es común escuchar hoy en día que las personas hacen planes de vida en los que incluyen viajes, negocios, fiestas, cenas, compras y muchas otras cosas más. También es cierto que el ser humano con su libertad, inteligencia y voluntad piensa en un futuro mejor que lo lleve a lo que más anhela su corazón, sin embargo, muchas veces vemos cómo familiares, amigos y conocidos no siempre encuentran eso que buscan con tanto afán, perdiendo de vista lo esencial.
Nada mejor para captar lo esencial de la vida que verlo reflejado en aquellos que lo han experimentado. Conoce tres testimonios de personas que de distintas formas encontraron la felicidad en su vocación al amor:
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El primer caso es el de Gloria Arango, la hija menor de 16 hermanos, que ante la muerte de su padre le promete a éste llevar una vida ejemplar, sin embargo, en esa búsqueda de lo que verdaderamente anhela el corazón humano, se desordena y se deja llevar de un ambiente en el que se promueven la droga, el alcohol y la promiscuidad. No obstante los planes de Dios son distintos a los nuestros y ella, a raíz de un voluntariado que hace en la cárcel, aprende lo que es el verdadero agradecimiento de corazón y encuentra un auténtico motor de cambio. De ahí en adelante su vida adquiere un sentido, porque ella se encuentra con Dios.
El segundo testimonio es el de Richard y Diana, dos jóvenes que antes de encontrarse habían sentido el llamado a la vocación religiosa, pero que se conocen y hacen discernimiento de su vocación hasta reconocer que están llamados al matrimonio. Todavía jóvenes se casan y forman una familia según sus criterios, acomodando un poco los de Dios.
Richad, exmilitar de profesión, decide realizarse la vasectomía para no tener más hijos, sin embargo, su esposa queda en embarazo una vez más. Por segunda vez sigue insistiendo en esta decisión y vuelve a realizarse la vasectomía, pero nuevamente su esposa queda en embarazo. Finalmente se rinden ambos ante los planes de Dios y deciden no hacer caso a sus planes sino a la voluntad de Dios, aceptan ser cocreadores con Dios, y formar como ellos dicen “su propio batallón”. Hoy son padres dichosos de 9 hijos.
El tercer testimonio es el de Andrés Gutiérrez, hombre de éxito profesional que trabaja en una de las grandes empresas de tecnología del mundo, con todas las garantías laborales, cualidades como persona, pero con un profundo sentimiento de amor de Dios que lo llama, hasta que se rinde a dejarlo todo y a entregar su vida a los más necesitados haciéndose sacerdote de Dios.
Estos tres testimonios de colombianos hicieron parte de las experiencias compartidas con los jóvenes en el Congreso Internacional de jóvenes provida: “Vivamos un amor auténtico”, celebrado en La Ceja-Antioquia el pasado mes de septiembre.
Para todos los que piensen que estos testimonios son motivantes va esta pregunta: ¿Estamos viviendo nuestros planes o los que Dios quiere para nosotros?
“Porque yo conozco muy bien los planes que tengo proyectados sobre ustedes –oráculo del Señor–: son planes de prosperidad y no de desgracia, para asegurarles un porvenir y una esperanza”. Jeremías 29,11
Es precisamente esto lo que muchas veces perdemos de vista, la voluntad de Dios, su plan sobre nosotros, no es un plan para destruirnos sino para asegurarnos un porvenir y una esperanza mejor, la plenitud de vida.
Si quieres ver los testimonios completos puedes encontrarlos aquí:
Testimonio de Gloria Arango:
Testimonio de Richard y Diana – Hna. Natalia Bernal – Padre Andrés Gutiérrez (1:04:00):
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