La voz con mayor influencia actualmente en Bolivia es sin duda la de Luis Camacho, quien se apartó de Carlos Mesa, el adversario político de Evo Morales y quien quedó de segundo en las pasadas elecciones, para atreverse a pedir abiertamente la renuncia del mandatario aliado del régimen de Maduro.
El domingo pasado Camacho entró al palacio con una Biblia y una carta de renuncia para que la firmara Evo Morales.
No tumbamos gobiernos, liberamos un pueblo en fe.
– Luis Fernando Camacho
Pocos minutos después, y luego de perder del apoyo de la policía los militares, se conocía la renuncia del mandatario indigenista, que fue celebrada en la mayor parte del país, sin derramar una gota de sangre.
A la comunidad internacional:#Bolivia#BoliviaNoHayGolpe#Bolivialibre@soyfdelrincon #concluELEXBOL20 //t.co/pQz3RkKMQ9
— Luis Fernando Camacho (@LuisFerCamachoV) November 11, 2019
Camacho celebró de Cristo volviera al palacio presidencial boliviano, y ante los señalamientos de dirigir una organización paramilitar ultraderechista el líder opositor explicó que su lucha la hace «no con armas sino con Fe».
De la mano de la Virgen María, termina el reinado de la Pachamama en Bolivia
La abierta fe religiosa que reconoce el líder político boliviano, ya ha hecho sonar las alarmas «antifascistas» en las redacciones de los principales medios de América Latina, quien ya lo comparan con Bolsonaro.
A sus seguidores les pide que a las movilizaciones lleven a la Virgen, y el pasado 4 de octubre reunió a sus seguidores «a los pies del Cristo Redentor» en la ciudad de Santa Cruz.
Cabeza visible de los comités cívicos en Bolivia, que aglutinan a sectores empresariales, gremiales y barriales de las principales ciudades del país, Camacho ha expresado no tener interés en la política.
Sin embargo, en la región de Santa Cruz de donde es oriundo es presentado como el presidente, y en las movilizaciones ha recibido un gran respaldo popular en los antiguos bastiones de Evo Morales, al tiempo que ha hecho gestos políticos con los indígenas como salir abrazado de mujeres en Pollera y aceptar un collar hecho con hojas de coca.
Mientras el golpista Fernando Camacho dice “la Pachamama nunca volverá al Palacio. Bolivia es de Cristo».
— Lautaro FyM (@Lautafym) November 11, 2019
En la foto, encapuchados bajan la bandera Whipala del Palacio de Gobierno.
Un día tristísimo para la Patria Grande. pic.twitter.com/wTFqdnabrO
A pesar de ser señalados como miembro de la logia masónica «Los Caballeros del Oriente», la condena unánime que de él han hecho grupos progresistas, quienes lo califican de fascista, ultra derechista, misógino y racista, debería generar tranquilidad sobre la firmeza y solidez de sus principios morales.
