Luego de la invitación de Claudia López, fórmula de Sergio Fajardo, para que los jóvenes seguidores del Partido Verde escondan los documentos de identidad de sus familiares uribistas, y de la de Petro a sus electores para que «incendien» las plazas del país si no llegara a pasar a la segunda vuelta, en la tarde, ahora se descubre un último intento de fraude contra la campaña de Iván Duque a la presidencia: engañar a los electores para anular el mayor número posible de sus votos.
Se ha difundido por redes sociales una supuesta resolución del Consejo Nacional Electoral, con la firma falsificada de la presidente de esa organización, en la que se exigiría que se marquen dos partidos políticos (Centro Democrático y Somos) para que los votos por Duque sean válidos.
En realidad, según las actuales directrices de la Registraduría Nacional si en un tarjetón se llegan a marcar dos partidos distintos el voto será nulo. El hecho de que los dos partidos, luego de diseñado e impreso el tarjetón, hagan una alianza y se retire una de las candidaturas, no se contempla como excepción para la nulidad del voto, algo que podría cambiar en caso de que el Registrador, consciente del alcance que este tipo de fraude podría tener en electores, ajustara las instrucciones al respecto para evitar que un número importante de votos de buena fe sean anulados.
Por otra parte, teniendo en cuenta la facilidad de realizar un seguimiento de la trazabilidad de este tipo de comunicaciones en la era digital, se presentara una denuncia penal para que la Fiscalía actúe con prontitud y establezca quienes originaron esta información falsa. No tendría nada de raro que sean seguidores de los candidatos que, en su actitud de «todo vale», invitan a esconder cédulas y a «incendiar» las plazas públicas.