Gran consternación generó en el mundo católico y provida, las imágenes del presidente de Argentina Alberto Fernández, recibiendo la comunión en una capilla cerca a la tumba de San Pedro, en la Santa Sede, de manos del Obispo también argentino, Marcelo Sánchez Sorondo.
La legalización del aborto es el proyecto bandera del gobierno de Alberto Fernández, luego de que por un escaso margen el proyecto fuera derrotado en el pasado gobierno de Marcelo Macri.
Fernández recibió la comunión junto a su concubina, la actriz Fabiola Yáñez, con quien convive de manera informal en el palacio presidencial, a pesar de que tiene un matrimonio católico válido con Marcela Luchetti y que luego convivió con Vilma Ibarra con quien tiene tres hijos.
¿Aplicación del Amoris Laetitie?
Algunos comentaristas católicos señalaron que de acuerdo con la interpretación más heterodoxa de la encíclica Amoris Laetitia, las parejas que viven en adulterio podrían recibir la comunión validamente luego de hacer un camino penitencial en el que adviertan que no tienen ninguna otra alternativa moral «viable» que la de seguir viviendo en pecado mortal.
De esta manera El Vaticano estaría respaldando de forma práctica dicha interpretación, que contradice la perenne doctrina católica.
Fernández reclama y Francisco acata
El encuentro de 44 minutos con el Papa Francisco que tuvo lugar luego de la misa, también dio lugar a un pequeño incidente diplomático.
En un primer momento El Vaticano había publicado una breve nota de prensa que daba a entender que el Papa Francisco habría tocado el tema del aborto con el presidente argentino.
Tal imprecisión habría molestando al mandatario argentino quién le reclamó una rectificación al Papa Francisco.
– Ya lo mando a corregir– respondió pocos minutos después el Papa, según relataron en la delegación argentina.
Minutos después El Vaticano remitió una inusual comunicación a los periodistas acreditados, explicando que los temas mencionados inicialmente no habían sido tocados en su integridad en la reunión entre el Papa y el presidente argentino.
Legalización del aborto en Argentina parece inminente
Precisamente el Ministro de Salud, Ginés González García, confirmó Este martes al periódico La Nación de Argentina que el gobierno de Fernández está trabajando junto a otros misterios en el proyecto de interrupción voluntaria del embarazo.
«Yo creo que se va a aprobar este año, pero no depende de mí», dijo el funcionario en declaraciones a Radio La Red, en relación con el proyecto de legalización del aborto.
«Los políticos pensarán que el papa es relativista», dice Monseñor Aguer
Todo este incidente provocó una profunda reflexión de parte del Exarzobispo de la Plata, Monseñor Aguer, señaló el terrible impacto cultural y político que tendría todo este incidente:
Nuestros políticos son moralmente relativistas, y deben pensar que el Papa también lo es.
El diputado Valdéz, ex embajador ante la Santa Sede, ya había declarado que Francisco «comprendería».
En vísperas de su encuentro con el pontífice, el presidente anunció que el tema del aborto no se trataría en la conversación; el crimen abominable –así llamó al aborto el Concilio Vaticano II– no es un asunto importante comparado con los de la pobreza, el hambre y la deuda.
¿Habrá sido así?. No tenemos posibilidad de saberlo, pero ¿no podemos pensar que al Papa le causaría una enorme pena que su país de origen se sume a los que ya han incluido en sus legislaciones la permisión de matar impunemente a los niños por nacer? ¿Y que, por tanto, le haya recordado al Dr. Fernández –que para la ocasión se ha identificado como católico– que incurriría en una gravísima responsabilidad ante Dios al propiciar esa medida?
Dicen que se trató del tema en la Secretaría de Estado. ¿Tendrá algún efecto?. Porque no es lo mismo. Llamó la atención que el presidente se declarase hijo de la Iglesia, que asistiera a misa con su pareja, y que recibiera la Sagrada Comunión, de manos de un arzobispo argentino.
¡Es increíble, pero entre compatriotas del mismo palo todo resulta finalmente posible!. Un escándalo más, entre tantos otros…
La gravedad de recibir la comunión indignamente
A pesar de que el mundo moderno ha difuminado la idea del pecado, convirtiéndolo en algo relativo, y que muchos acceden a la comunión a pesar de ser conscientes de vivir en pecado mortal, la Iglesia es clara en la gravedad de recibir el cuerpo y la sangre de nuestro señor sin estar en gracia de Dios, es decir, sin pecado mortal.
Al respecto se pronuncian las siguientes frases del Evangelio, entre otras:
1Co 11,27-29
27. De manera que cualquiera que comiere este pan, o bebiere el cáliz del Señor indignamente, reo sera del Cuerpo y de la Sangre del Señor.
28. Por tanto, examínese a si mismo el hombre, y de esta suerte coma de aquel pan y beba de aquel cáliz.
29. Porque quien lo come, y bebe indignamente, se traga y bebé su propia condenación, no haciendo el debido discernimiento del Cuerpo del Señor.