El NY Times publicó la carta del Papa dirigida a Michael O’Loughlin, periodista de la revista jesuita América, en la que pone como ejemplo a los laicos y religiosos que durante décadas “optaron por acompañar, sostener y asistir” a enfemos con VIH/Sida.
El Papa estaba respondiendo a una carta en la que O’Loughlin le ofreció al Papa su libro, “La misericordia oculta: SIDA, católicos y las historias no contadas de compasión ante el miedo”.
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Michael O’Loughlin rechaza la enseñanza de la Iglesia sobre la homosexualidad, y utiliza su libro para destacar historias de personas como la exmonja Carol Baltosiewich, quien abandonó la Iglesia para unirse a las “Hermanas por una comunidad cristiana”, que se define como una “Orden religiosa contemporánea, no canónica y ecuménica de mujeres fundada en 1970 en respuesta directa al Concilio Vaticano II de la Iglesia Católica Romana. Los miembros viven según un perfil que encarna los valores y principios definidos y establecidos en los documentos oficiales del Concilio Vaticano II”.