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La secretaria del Tesoro del gobierno de Joe Biden, Janet Yellen, hizo una intervención ante el Congreso en la que argumentó que el aborto era necesario para impulsar la economía.
Se enfocó en que si abortan las mujeres negras pobres pueden vincularse a la fuerza laboral en lugar de criar a su hijos.
Sus comentarios fueron rechazados de inmediato por el senador negro de Carolina del Sur, Tim Scott, quien dijo que su madre fue negra y pobre.
“¿Usted dice que acabar con la vida de un niño es bueno para la tasa de participación en la fuerza laboral?” preguntó el senador Scott.
“Simplemente diré que, como hombre criado por una mujer negra y en pobreza extrema, estoy agradecido de estar aquí como senador de los Estados Unidos…Mi circunstancias se parecen a las de muchos otros. Millones y millones de niños criados en la pobreza por familias monoparentales que son negras. Decirle a las madres adolescentes negras que solo hay una alternativa para ellas es un mensaje deprimente y provocador”.
El senador Scott profundizó en su crítica a las declaraciones de Yellen en un artículo de opinión publicado en el Washington Post, oponiéndose especialmente a la afirmación de que el aborto es necesario para que los negros permanezcan en la fuerza laboral.
“Para mí, esto fue sorpresivo. Pensé que la había oído mal. ¿Estaba Yellen argumentando que el aborto es bueno para la fuerza laboral de Estados Unidos?”.
“Pero cuando se lo pregunté, Yellen reiteró un argumento que insensible e inhumano para justificar el acabar con vidas inocentes”.
Scott describió cómo su madre trabajó duro para darle lo mejor a él y a sus hermanos.
“En ese momento, me sentí obligado a levantar la voz para hablar en nombre de personas como mi madre. Hay voces hoy que les dirían que nuestras vidas no tenían esperanza. Que nuestra vida como familia no valía la pena vivirla, y que Estados Unidos estaría mejor si no existieran personas como nosotros”.
La afirmación de Yellen de que el aborto ayuda a sacar a las mujeres de la pobreza ha sido desacreditada reiteradamente.
Después de más de cuarenta años de la legalización del aborto en EEUU, los nacimientos fuera del matrimonio han aumentado, y la feminización de la pobreza se ha radicalizado.
En lugar de ayudar a matar a sus hijos el gobierno debería trabajar para ayudar a las mujeres pobres puedan sacar adelante a sus hijos y a sus familias.
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