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Comenzó la persecución de los provida en España: irán a la cárcel por rezar y salvar vidas 

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Escrito por JOSE SOSA

¡Ha iniciado la persecución a los provida en España. Con 154 votos a favor y 105 en contra aprueban penas prisión de tres meses a un año para los provida que se coloquen alrededor de centros abortivos.

Lo que hace años atrás parecía solo una remota ocurrencia apocalíptica, se convirtió en realidad el pasado 6 de abril en España: es delito rezar y mostrar otra opción a la madre que quiere abortar.

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Hecho lamentable

El pasado 6 de abril de 2022 el Senado español aprobó por 154 votos a favor y 105 en contra, la modificación del Código Penal para criminalizar a quienes oren en las inmediaciones de clínicas de aborto, con penas prisión de tres meses a un año.

Además, esta ley que fue impulsada por el partido de gobierno también busca penalizar lo que ellos llaman un supuesto “acoso” de los provida cuando abordan a las mujeres que quieren abortar para que desistan de hacerlo.

Trayendo como consecuencia la reforma el artículo 172 quáter del Código Penal por el que se indica que se impondrán penas de cárcel y distanciamiento a quien “para obstaculizar el ejercicio del derecho a la interrupción voluntaria del embarazo, acosare a una mujer mediante actos molestos, ofensivos, intimidatorios o coactivos que menoscaben su libertad”.

El portavoz del PP, Fernando de Rosa, acusó al PSOE de «retorcer» el Código Penal «a su antojo», como también los «derechos y libertades constitucionales».

Además, también recordó a los socialistas que el artículo 172 del Código Penal de España ya persigue el delito de coacciones, y dejó en evidencia la escasa calidad jurídica de la norma. 

“Están confundiendo coacción con coerción, lo cual puede tener consecuencias graves desde el punto de vista jurídico en nuestro ordenamiento. La jurisprudencia exige que la intimidación que supone la coerción siempre tiene que ser de suficiente entidad para poner en riesgo efectivo la libertad de acción de una persona.

La intimidación en sí misma no puede ser introducida como elemento definitorio de un nuevo tipo penal si no tiene la suficiente entidad para obligar o evitar que alguien realice algo a lo que tiene derecho.

Se trata de una cuestión de carácter meramente ideológico. Ustedes quieren que prevalezca un derecho sobre otro cuando no han entrado en colisión y ninguno se ha visto impedido en su ejercicio.”, dijo.

Por lo tanto, los provida se enfrentarán a penas de cárcel de 3 meses a un año o trabajos comunitarios de 31 a 80 días.

Además, el tribunal les podrá prohibir a aquellos que sean condenados “acudir a determinados lugares -alrededores de clínicas abortistas- por un tiempo de seis meses a tres años”. Además se precisa que “no será necesaria la denuncia de la persona agraviada ni de su representación legal”.

La oposición a la ley

El Partido Popular, Vox y Unión del Pueblo Navarro, se opusieron a esta, presentando dos propuestas de veto ante la Cámara alta, pero fueron rechazadas al no alcanzar la mayoría absoluta requerida.

Vox, por su parte, denunció que la aprobación de esta ley fue “el triunfo del negocio del aborto”.

Abortar es matar, es acabar con la vida de un ser humano“, dijo el senador de Vox Jacobo González-Robatto durante su intervención.

“Es un claro ejemplo de manipulación absoluta del lenguaje” el término “interrupción voluntaria del embarazo”, añadió

“Amputación de las Libertades fundamentales”

Según informa Aci Prensa la plataforma One Of Us, aseguró que esta medida acaba “con la libertad de expresión y manifestación”. 

“Desde una concepción autoritaria del derecho penal y por razones políticas pero sobre todo ideológicas, un sector de la población que, siguiendo sus creencias defiende la vida, sufre la amputación de sus libertades fundamentales”, manifestaron en un comunicado. 

También expresaron que el “uso partidario del derecho que afecta no solo a los grupos provida que rezan u ofrecen ayuda a la mujer en su maternidad, sino también y sobre todo, a la propia mujer a la que se hurta la posibilidad de recibir ayuda o información ante una decisión grave para su vida y la del hijo por nacer”.

“Es el triunfo del negocio del aborto frente a la protección a la mujer y a la vida.  Es el reconocimiento de una tragedia como sujeto de un derecho que debe ser protegido en el código penal”, destacaron en un comunicado. 

“Desde One of Us apoyaremos por los medios que el ordenamiento jurídico reconoce, a la mujer y a los movimientos que trabajan por su defensa y su protección”.

“Hoy son los grupos y personas que defienden la vida y su dignidad, mañana será cualquier manifestación que se antoje lesiva a lobbies poderosos , ideologías o negocios”. 

Manifestación de grupos provida

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Un grupo de activistas provida rezando un Rosario a modo de protesta en las afueras del Senado.

La oración estuvo a cargo de Jorge y Pilar, dos jóvenes de 19 años que forman parte de la iniciativa Rezar no es delito.

«Están persiguiendo y criminalizando a quienes rezan en la calle por el fin del aborto», dijo Jorge.

“No vamos a renunciar a nuestra fe en público a pesar de las persecuciones y todo lo que nos quieran imponer”, agregó

María otra joven que también estuvo allí, explica que si quieren ilegalizar lo que ellos hacen es “porque algo estamos removiendo en sus conciencias”.

No los quieren escuchar ni ver rezar en los centros abortistas, y para estas chicas la causa es que su acción es “un susurro dentro de las cabezas de la gente que sabe que lo que están haciendo está mal”.

“No queremos que nos metan en la cárcel por rezar y no sabemos si pretenden meter a cientos de personas en prisión; pero si es así, allí estaremos”, expresó Jorge Pilar

Como convencemos a sus “clientes” en potencia y rescatamos a esas madres, lo más fácil es callarnos, ilegalizarnos y seguir embolsándose el dinero en el bolsillo“.

En su manifestación además, portaban letreros y pancartas que decían: “Stop persecución provida”, “soy provida, no delincuente” y “por ayudar a una mujer iré a la cárcel”.

Varias activistas provida en septiembre en el Congreso

En conclusión han llegado tiempos en los cuales “será preciso desenvainar una espada por afirmar que el pasto es verde” como decía Chesterton y por causa de esta aquellos que lo hagan serán juzgados.

Este tipo de propuestas no tardarán en llegar a nuestros países, interpelando a los provida: ¿hasta qué punto estamos dispuestos a asumir las consecuencias de la defensa de la vida?

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