El pasado miércoles 11 de noviembre se rompió un nuevo «Guinness World Records» ya que nació el bebé más prematuro del mundo en sobrevivir.
El lugar testigo de este acontecimiento fue Alabama, donde un niño que nació a las 21 semanas, del tamaño de un balón de fútbol, es ahora oficialmente el bebé más prematuro del mundo que ha sobrevivido.
El bebé solo tenía un 1 % de probabilidades de sobrevivir, situación que complicaba más el estado de salud del pequeño.
“Los números dicen que los bebés a esta edad no sobrevivirán. La pregunta de mamá para mí fue: ‘¿Podemos darle una oportunidad a mis bebés?’”, dijo el Dr. Brian Sims, el neonatólogo que supervisó el parto, según Guinness.
El niño de nombre Curtis Means pesaba 14,8 onzas, menos de una libra, cuando nació en Birmingham, Alabama, en julio de 2020, informó Associated Press.
Lamentablemente la hermana gemela de Curtis, C’Asya, murió al día siguiente de su nacimiento.
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“El personal médico me dijo que normalmente no tienen bebés a esa edad”, dijo Michelle “Chelly” Butler a Adam Millward de Guinness World Records. «Fue muy estresante».
“Los números dicen que los bebés a esta edad no sobrevivirán”, dijo el Dr. Brian Sims, el neonatólogo que supervisó el parto de los gemelos y que estuvo muy involucrado con el tratamiento posterior de Curtis. Pero «la pregunta de mamá fue: ‘¿Podemos darle una oportunidad a mis bebés?'».
“No sabían si iba a sobrevivir, así que simplemente me dijeron que siguiera orando”, dijo Chelly Butler. Desafiando el pronóstico sombrío y elevado en oración, Curtis «respondió extraordinariamente bien al tratamiento y, a medida que pasaban los días y las semanas, se hacía cada vez más fuerte».
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