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Ante la profanación de la Catedral, manizaleños repararon con oración y rosas blancas

Más de 100 personas acudieron al acto de desagravio, que comenzó en la Plaza de Bolívar de Manizales y terminó alrededor del altar de la Basílica, a la misma hora en que el universitario se desnudó delante de los fieles el 2 de noviembre. El rector de la Universidad de Caldas sigue sin pronunciarse oficialmente, pese a que más de 3 mil ciudadanos se lo han pedido vía e-mail.

“Hace 8 días Cristo y María vieron una escena que da vergüenza, y no me refiero a ver a ese hombre sin ropa, el cuerpo de ese hombre Cristo lo conoce porque Él lo creó, me refiero a la vergüenza y al dolor de tener que ver ese corazón soberbio que se niega a la gracia y a la felicidad verdadera. En cambio, ayer ese par que me derriten de amor, Él y Ella, vieron más de 100 corazones llenos de miseria, pero engrandecidos gracias a ese amor del Cielo que hace el verdadero performance y que no hace show”.

Con estas palabras la manizaleña Diana López describió el acto de desagravio en el que participó con más de 100 creyentes el 9 de noviembre, entre 1:00 y 2:00 de la tarde, en la Catedral Basílica de Manizales, una semana después de que un estudiante de Artes Escénicas de la Universidad de Caldas ingresara en tacones, rostro enmascarado y un abrigo hasta el altar y allí se desnudara, delante de familias con niños, como una supuesta muestra artística de un festival.

La indignación que se hizo sentir en las redes sociales, incluso de personas no creyentes que señalaron el claro irrespeto de los organizadores del festival con la Fe católica y sus templos sagrados, motivó a un grupo de laicos con el respaldo de la Arquidiócesis a convocar el rezo del Santo Rosario. Niños, familias enteras, jóvenes, adultos mayores, religiosas y sacerdotes elevaron Ave Marías como testimonio público de su Fe y en reparación por el sacrilegio cometido, además de dejar rosas blancas en las escalinatas del altar mientras cantaban.

Al final de esta “cita de amor con Jesús y María”, algunos laicos plantearon la posibilidad de escribirle al Arzobispo de Manizales, Monseñor Gonzalo Restrepo, solicitándole que declarara oficialmente la excomunión al joven agresor. En comunicado de prensa el prelado había afirmado: “condenamos y rechazamos todo acto profano y de irrespeto máximo a nuestros templos y lugares sagrados”, pero todavía no se conoce alguna declaración definitiva sobre la posible excomunión.

Incluso líderes protestantes rechazaron la profanación de la Catedral, como el Concejal de la Familia Marco Fidel Ramírez, para quien se trató de un delito de hostigamiento por razón de religión, contemplado en el Art. 134B del Código Penal Colombiano. “Fue un acto de intolerancia que acrecienta la amenaza contra las libertades de cultos y de conciencia consagrados en la Constitución. ¡No respetan a Dios ni a la ley, ni siquiera en la intimidad de los espacios sagrados!”, cuestionó.

Entre tanto, más de 3 mil 700 personas han firmado una alerta ciudadana, pidiéndole al rector de la Universidad de Caldas, Alejandro Ceballos, que “se haga un pronunciamiento público a la mayor brevedad posible, disculpándose con la comunidad ofendida, aclarando si este tipo de violencia antirreligiosa es promovida desde el pénsum de la universidad y tomando las medidas correctivas que sean del caso”.

Súmate y firma la alerta ciudadana: Pronunciamiento sobre acto sacrílego en la Catedral de Manizales

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