La periodista adscrita al periódico “The Times”, Flora Gill, generó una gran indignación en redes al afirmar en Twitter que debería haber «material pornográfico de iniciación» hecho específicamente «para niños».
“Alguien necesita crear pornografía para niños.
Escúchenme. Los adolescentes jóvenes ya están viendo pornografía, pero están encontrando videos agresivos y duros que ofrecen una visión terrible del sexo.
¡Necesitan pornografía de nivel de entrada!
Un sitio básico en el que todos piden su consentimiento y nadie se ahoga, etc.«.
Cuando la polémica estaba en todo su furor, intentó matizar su idea: «niños significa menores de 18 años. Estoy hablando de personas de 14/15/16 años», dijo en otro trino.
Luego de ver que la indignación no disminuyó, Gill decidió eliminar los trinos, cerrando el tema:
“A propósito de nada, realmente creo que si alguien borra rápidamente un tweet, no debería ser capturado y compartido como… déjalo morir, ¿sabes? ¿No? ¿Nadie más está de acuerdo?”.
La progresiva eliminación de tabúes en materia sexual, está facilitando cada vez más la normalización de la pornografía, esta vez, con el argumento de la «defensa de los derechos de los niños» y de «protegerlos» contra realidades «inevitables».
Sólo un retorno de las virtudes de la castidad, la pureza y la modestia, enseñadas como parte de la integridad de la persona alcanzable mediante la ascesis cristiana, podrá evitar que la sociedad vuelva a prácticas barbáricas como la normalización de la explotación sexual de los niños.