“2270: La vida humana debe ser respetada y protegida de manera absoluta desde el momento de la concepción. Desde el primer momento de su existencia, el ser humano debe ver reconocidos sus derechos de persona, entre los cuales está el derecho inviolable de todo ser inocente a la vida”
— Catecismo de la Iglesia Católica
Detrás de los pañuelos verdes, no hay mujeres; hay empresas que manejan las heridas y los conflictos convirtiendo un cuerpo sin vida en unos cuántos pesos y un vientre en sepulcro.
Hay un demonio que roba el alma, la paz y destruye almas de quienes participan de este pecado mortal.
Hablar del aborto se ha convertido en un tema recurrente, hoy defender la vida se hace una necesidad absurda, ¿cómo puede ser que se asesine niños indefensos, en el vientre de sus madres como una práctica común, un derecho o como “planificación familiar”?
La palabra de Dios nos dice en Oseas 4;6 “”Mi pueblo languidece por falta de conocimiento“, el afán del mundo nos ha llevado a normalizar el pecado de tal manera que el filicidio se considera derecho.
Pero, ¿qué hay realmente detrás del aborto?
Mucho se ha dicho acerca de la relación del aborto con el satanismo, de hecho se ha hablado acerca del demonio al cual estarían ofrecidos los bebés abortados, pues bien conozcamos un poco más de éste tema para luego entender mejor el aspecto humano que gira en torno a este pecado.
En los rituales, se ofrendan como sacrificio niños a una estatua de bronce hueca a nivel del vientre donde se mantiene encendido el fuego, la estatua tiene la boca abierta y los brazos extendidos con las manos juntas y las palmas hacia arriba como esperando que se deposite a la víctima.
Luego, mediante un mecanismo de cadenas se levantan los brazos hasta la boca, dejando caer el cuerpo de la víctima dentro del vientre ardiente, cayendo al estómago en llamas.
¿Qué nos dice la iglesia acerca del aborto y ese demonio?
En varios libros de las Sagradas Escrituras se han encontrado algunas alusiones a Moloch:
- Moloc en Levítico 18-21; Levítico 20,2-5;
- Sacrificios infantiles por fuego en Deuteronomio 12,31; Deuteronomio 18,10; 2 Reyes 16,3; 2 Reyes 21,6; 2 Reyes 17,17; Jeremías 7,31; Ezequiel 16,20.
El código de derecho canónico, al tratar las sanciones en la iglesia; es muy claro y prevé que “1398: Quien procura el aborto, si éste se produce, incurre en excomunión latae sententiae”.
Qué quiere decir ésto, que cualquier persona bautizada (practicante o no de la fe) que apruebe, apoye, recomiende o facilite el aborto será automáticamente excomulgada sin necesidad de los trámites comunes para ésta sanción.
Actualidad del aborto
Debido a las políticas progresistas, el aborto forma parte de la agenda 2030, hay un interés desenfrenado en aumentar las muertes de niños inocentes a manos de sus propias madres destruyendo así la maternidad y las familias.
El 24 de junio del 2022, la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos, anula el fallo del caso Roe Vs Wade, anulando así el mal llamado derecho al aborto, lo cual desencadeno la ira de miles de promotores del aborto.
Desde ese momento hasta ahora el Templo de Satanás, ha demandado 3 estados buscando “proteger” los derechos de sus miembros argumentando que la ley viola no solo las libertades religiosas, sino también somete las mujeres embarazadas a la “servidumbre involuntaria”.
Aborto como ritual satánico
El Templo Satánico ve a la figura de Satanás, como símbolo de rebeldía y libertad, su activismo político y su posición ideológica es de izquierda, promueve ideas humanistas y socio-liberales.
Persigue la separación entre la Iglesia y el Estado, los Derechos Humanos y de las minorías, promueve el aborto, y el odio al cristianismo.
El “Ritual del Aborto Satánico” o “Ritual del Aborto religioso”, fue introducido para apoyar una excepción religiosa ya que argumentan, el aborto es un ritual religioso.
Cabe aclarar que históricamente las iglesias satánicas a la par del infanticidio buscan la ‘violación ritual’ de mujeres y de niñas, sin embargo el progresismo no ha conseguido aún, el avance esperado para violaciones o pedofilia (aunque hemos visto grandes avances en los medios de comunicación).
¿Por qué hablar de ésto?
Ante los ataques a la cultura de la vida, la tradición y la fe; se hace necesario aclarar, revelar y educar a quienes estamos en constante activismo provida; debemos tener claridad en que la vida se defiende desde la casa, la iglesia, el colegio, la universidad, el trabajo.
Ser provida no es ponerse un pañuelo celeste para marchar un par de veces al año y salir en fotos, tampoco es orar solo dos veces al año en campañas, ésto es supremamente necesario, debemos hacerlo diariamente pues cada vez se evidencia más que estamos en una batalla espiritual.
Ser provida es respetar la vida desde la concepción hasta la muerte natural, orar por vivos y difuntos (finalmente somos provida eterna), defender mujeres, hombres y niños, luchar por las familias.
Llegar a púlpitos y tribunales sí se hace necesario, ser provida no es una moda, es un estilo de vida, un compromiso con la eternidad.