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En la nueva película de Netflix “Damsel”, estrenada el 8 de marzo, una escena fundamental traza un vívido paralelismo con el horror y la realidad del aborto de una manera que ninguna película pro-vida podría. En la escena, un príncipe lleva en brazos a su nueva esposa, una princesa, sobre un puente colgante suspendido en una caverna oscura. Él le susurra “lo siento” y, para su absoluta conmoción y horror, la arroja al vacío donde habita un dragón demoníaco.
Esta escena impactó a la autora de un artículo en LifeSiteNews, madre de ocho hijos y activista pro-vida, como una analogía del aborto. La joven confiaba en el príncipe como protector y proveedor, al igual que el bebé anidado en el vientre materno. Ella debía sacrificar su vida por los pecados de la familia real, no los suyos propios, tal como el bebé en el vientre debe morir por los pecados o conveniencia de los padres. La racionalización de la familia real sobre por qué debía ser sacrificada se desmorona al ver la potencial destrucción de la vida de la princesa, así como la racionalización del aborto se desmorona al considerar la pérdida de una vida humana.
Fuente:The unexpected pro-life analogy in the new Netflix movie ‘Damsel’ – LifeSite
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