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Una pareja británica vivió una pesadilla después de ser arrestada frente a su hija de 9 años por expresar quejas sobre la escuela primaria Cowley Hill en un grupo de WhatsApp. Maxie Allen, productor de Times Radio, y su pareja Rosalind Levin fueron detenidos durante ocho horas tras una investigación policial que finalmente concluyó sin cargos.
Los eventos comenzaron en mayo de 2024 cuando Allen cuestionó por escrito a los gobernadores escolares sobre la demora en iniciar el proceso de reclutamiento para reemplazar al director saliente, quien había anunciado su retiro seis meses antes. La situación escaló en junio cuando Jackie Spriggs, presidenta de los gobernadores escolares, advirtió que tomarían medidas contra quienes causaran «desarmonía».
La pareja fue posteriormente vetada de ingresar a las instalaciones de Cowley Hill Primary School en Borehamwood, Hertfordshire, después de hacer comentarios considerados «despectivos» en un grupo de WhatsApp de padres y «lanzar acusaciones» contra la presidenta de los gobernadores. Esta prohibición les impidió incluso asistir a la reunión de padres de su hija Sascha.
«Nunca usamos lenguaje abusivo o amenazante, ni siquiera en privado, y siempre seguimos el proceso debido«, declaró Allen al periódico The Times, calificando la experiencia como «kafkiana» y denunciando un «exceso masivo» por parte de la policía. «Ni siquiera nos han dicho cuáles fueron estas supuestas comunicaciones criminales«, agregó.
La tensión aumentó cuando Levin hizo comentarios sobre la directora interina Louise Thomas, sugiriendo que la escuela había reaccionado de manera exagerada ante publicaciones en redes sociales. La administración escolar restringió entonces toda comunicación a correos electrónicos. La pareja continuó enviando mensajes regularmente, intentando que se levantara la prohibición, especialmente considerando que su hija padece epilepsia.
El 29 de enero, seis oficiales de policía se presentaron en su domicilio para arrestarlos. «Cuando la policía apareció en la casa, pensé que Sascha estaba muerta, ya que no podía pensar en ninguna otra razón por la que seis oficiales estarían en mi puerta«, relató Levin. La pareja fue interrogada bajo sospecha de acoso, comunicaciones maliciosas y causar molestias en propiedad escolar. ¿Qué tal? Dedicar las fuerzas, el personal y el aparto policivo a semejantes “crímenes”…
Un portavoz de la escuela Cowley Hill defendió sus acciones: «Buscamos asesoramiento de la policía después de recibir un alto volumen de correspondencia directa y publicaciones en redes sociales de dos padres, ya que esto estaba perturbando al personal, padres y gobernadores. Siempre estamos dispuestos a que los padres planteen inquietudes, pero pedimos que lo hagan de manera adecuada y siguiendo el procedimiento de quejas publicado por la escuela».
Por su parte, la Policía de Hertfordshire justificó el arresto como «necesario para investigar completamente las acusaciones, como es rutinario en este tipo de asuntos», aunque finalmente determinó que “no había evidencia suficiente” para proceder con cargos.
Este caso ha generado debate sobre los límites de la libertad de expresión, los derechos de los padres y el exceso de una impostura escolar en entornos educativos, así como el uso desproporcionado de recursos policiales en cuestiones inocuas, especialmente considerando que la investigación se extendió por cinco semanas antes de ser desestimada.
Fuente: Parents ARRESTED after complaining about daughter’s primary school in WhatsApp group
