Si quieres recibir noticias de actualidad sobre la Cultura de la Vida, te invitamos a seguirnos en nuestro CANAL DE TELEGRAM haciendo clic AQUÍ.
Los obispos católicos de Noruega se han unido a más de 30 comunidades cristianas al firmar una declaración que afirma las visiones tradicionales cristianas sobre el género y la sexualidad. El documento, titulado «Declaración ecuménica sobre el género y la diversidad sexual«, afirma que el sexo biológico de la humanidad se define en la concepción y desafía las opiniones contemporáneas sobre la identidad de género, que describe como impulsadas ideológicamente y científicamente infundadas.
La declaración establece: «Dios creó a los humanos como hombres y mujeres… El matrimonio es la unión entre un hombre y una mujer, establecida por Dios y reconocida por la Iglesia Cristiana a lo largo de los siglos«. Al defender estos valores, la declaración aboga por la estructura familiar tradicional y enfatiza que los niños están mejor atendidos cuando son criados por ambos padres biológicos. El concepto moderno de identidad de género como fluido y autodeterminado contradice este fundamento, argumentan los signatarios.
La declaración también advierte sobre el impacto de la ideología de género en los jóvenes. Introducir estas ideas a los niños «puede llevar a la confusión, la inseguridad y decisiones de vida destructivas para muchos niños y adolescentes».
El documento subraya la importancia de respetar la realidad biológica, afirmando: «La idea de que existe un género subjetivo y una ‘identidad de género’ autoelegida… no tiene fundamento en la biología o las ciencias naturales«.
El obispo Erik Varden de Trondheim, presidente de la Conferencia de Obispos Nórdicos, expresó empatía por aquellos afectados por la ideología de género, pero dijo que la enseñanza de la Iglesia es clara. «Queremos acompañar situaciones complejas con compasión y creatividad», dijo a CNA Deutsch. Varden dijo que la visión antropológica cristiana es consistente con los datos empíricos, afirmando: «Una comprensión cristiana de la vida es eminentemente concreta».
La declaración también acusa a las autoridades públicas de socavar la libertad religiosa. «Los organismos gubernamentales y las instituciones públicas abusan de su mandato y poder cuando intentan presionar a los ciudadanos y organizaciones para que se ajusten a la ‘teoría queer’ con respecto al género, la sexualidad y el matrimonio«, se lee en la declaración.
Reflexionando sobre casos como la clínica de identidad de género Tavistock de Inglaterra, que se cerró después de una revisión crítica, el obispo Varden señaló: «El coro de voces que quieren ser escuchadas se está haciendo más y más fuerte. Eso es algo bueno». Dijo que los obispos tienen la intención de contribuir positivamente al debate nacional, afirmando: «Nuestra declaración no es ni enojada ni sobre el mostrador. Surge, en oración, de nuestro compromiso con nuestra nación y nuestro deseo de construirla«.
La declaración se produce en medio del Sínodo en curso sobre la Sinodalidad, que los grupos de interés especial están tratando desesperadamente de influir. La Catholic News Agency describe el Sínodo como:
«El Sínodo sobre la Sinodalidad, iniciado por el Papa Francisco en octubre de 2021, es un emprendimiento mundial y plurianual durante el cual se pidió a los católicos que presentaran comentarios a sus diócesis locales sobre la pregunta «¿Qué pasos nos invita el Espíritu a dar para crecer en nuestro ‘caminar juntos?'».
The Times informa reclamos de un grupo católico liberal radical de que el Papa Francisco expresó en privado el deseo de nombrar obispos en los Estados Unidos que serían más «receptivos» hacia los católicos transgénero.
New Ways Ministry, un controvertido grupo estadounidense que discrepa de la enseñanza de la Iglesia sobre algunos temas morales, dijo que el Papa hizo los comentarios durante una reunión privada de 80 minutos en su residencia con 11 personas, incluidos católicos transgénero e intersexuales y sus partidarios.
Los activistas afirman que el Papa Francisco sugirió que consideraría la apertura de los obispos a los temas transgénero como un criterio para futuros nombramientos en los EE. UU., aunque esto no ha sido confirmado por el Vaticano, que se negó a comentar.
Jonathan Liedl, editor senior de National Catholic Register, ha escrito sobre cómo los grupos de interés especial están influyendo en el Sínodo sobre la Sinodalidad organizando eventos paralelos y alentando a los medios afines a informar sobre ellos.
Por ejemplo, AmerIndia, una red de católicos latinoamericanos progresistas, invitó a delegados sinodales a discutir la ordenación de mujeres. Tales eventos, aunque no forman oficialmente parte del sínodo, luego son amplificados por medios afines, creando la percepción de que estos temas progresistas tienen un apoyo más amplio dentro de la Iglesia del que pudiera ser el caso.
Del mismo modo, el grupo de defensa LGBT del P. James Martin, Outreach, organizó un evento paralelo donde varios católicos que se identifican como LGBT hablaron. Aunque el evento estaba cerrado a la prensa, Outreach publicó un informe al respecto, que el P. Martin amplificó a través de su gran presencia en las redes sociales, afirmando que la reunión fue «histórica».
Liedl señala que esta práctica se asemeja mucho al cabildeo político. Estos eventos paralelos, si bien aumentan la visibilidad de ciertas causas de moda, eclipsan otros temas que podrían resonar más profundamente con los católicos comunes.
Fuente: Norway’s Catholic Bishops Sign Declaration Against Gender Ideology ━ The European Conservative
