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En total contraste con las tendencias indicadas por un estudio referido en nuestro artículo anterior (Ver aquí), la llamada “Generación Z” muestra una tendencia creciente hacia posiciones provida, revelando con ello un giro significativo en las actitudes sobre el aborto en los campus universitarios estadounidenses. Datos recientes de AtlasIntel indican que el apoyo a posturas conservadoras entre los jóvenes de 18 a 29 años ha aumentado notablemente, alcanzando un 52.7% en febrero, lo que representa un incremento de 23 puntos porcentuales.
Este cambio demográfico desafía las suposiciones tradicionales del Partido Demócrata sobre el comportamiento electoral de las generaciones más jóvenes. El destacado encuestador demócrata David Shor expresó su asombro en el podcast de Ezra Klein:
“Es lo más sorprendente que he visto en los últimos cuatro años: los jóvenes han pasado de ser la generación más progresista desde los Baby Boomers a convertirse potencialmente en la más conservadora en 50 o 60 años”.
La presencia de organizaciones provida en universidades está experimentando un crecimiento notable. El capítulo Right to Life de la Universidad de Georgetown, que en 2021 apenas subsistía, ahora cuenta con aproximadamente 80 miembros. Leah Raymond, coordinadora de eventos del grupo, confirma: “La membresía está creciendo. Hay más estudiantes conservadores dispuestos a mostrar su rostro”.
Esta tendencia se replica en otras instituciones prestigiosas. El club provida de la Universidad de Princeton ha superado los 80 miembros, convirtiéndose en uno de los grupos estudiantiles más numerosos del campus. En la Universidad de Ohio, Bobcats for Life surgió después de la revocación de Roe v. Wade, mientras que Choose Life at Yale (CLAY) ha intensificado significativamente sus actividades.
Las universidades católicas muestran un crecimiento aún más pronunciado. El club Right to Life de la Universidad de Notre Dame reporta más de 900 miembros en su lista de correo y GroupMe, un aumento considerable desde los 700 del año anterior, posicionándose como el grupo estudiantil provida más grande del país.
Estas organizaciones estudiantiles desarrollan diversas actividades de apoyo comunitario, incluyendo colectas de pañales, servicios de cuidado infantil, recaudación de fondos para padres necesitados y voluntariado en centros de embarazo. También se centran en la apologética provida, fundamentando sus argumentos en principios científicos y éticos.
Sin embargo, estos grupos enfrentan resistencia en algunos campus. Philip Cooper, presidente de Students for Life en la Universidad de New Hampshire, reconoce: “Somos el club más controversial del campus”. En la Universidad de Ohio, los líderes del club han tenido que contactar a la policía debido a amenazas percibidas.
Las estadísticas electorales refuerzan esta tendencia conservadora entre la Generación Z. En las últimas elecciones, la Vicepresidenta Kamala Harris apenas superó a Donald Trump entre los votantes de 18 a 29 años, con un 52% frente a un 46%. Significativamente, el 57% de los hombres menores de 30 años votaron por Trump.
Como respuesta a este cambio, grupos abortistas como Princeton Students for Reproductive Justice están replanteando sus estrategias de activismo. Su presidente, Sam Yamashita, afirma: «Nuestro enfoque es ser la voz más fuerte, concentrando nuestra energía en nuestros propios esfuerzos y asegurándonos de llegar a la mayor cantidad posible de personas en el campus».
La Iglesia Católica mantiene una posición clara e invariable sobre el aborto: es moralmente inaceptable en todas las circunstancias. El Catecismo de la Iglesia Católica (2270-2275) afirma que la vida humana debe ser respetada y protegida de manera absoluta desde el momento de la concepción, considerando el aborto como un mal moral grave que resulta en la excomunión latae sententiae.
Los argumentos científicos y éticos en defensa de la vida no se anteponen a los teológicos, sino que los complementan y demuestran en aspectos fácticos: entre ciencia y antropología, entre razón y fe, no hay y no puede haber oposición o contradicción, pues proceden del mismo Dios en quien creemos. Los extremos, en este caso, serían el racionalismo y el fideísmo.
Fuente: Abortion Activists Freak Out Because Gen Z is Becoming More Pro-Life