La defensa de la vida ha tenido un importante éxito judicial hoy, con el pronunciamiento de la Quinta Corte de Apelaciones Estados Unidos respaldando la prohibición del Estado de Texas de realizar abortos selectivos durante la crisis del coronavirus.
Ya el Centro para el Control de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) y el Cirujano General de los Estados Unidos habían recomendado a las clínicas reprogramar los procedimientos electivos, tanto para limitar el riesgo de difusión del coronavirus como para concentrar los recursos en los pacientes ya infectados.
Texas, al igual que otros estados expidieron decretos dirigidos a suspender temporalmente todos los procedimientos médicos no esenciales, entre los cuales se encuentra el aborto.
Sin embargo, organizaciones abortistas han demandado dichas restricciones por ser supuestamente inconstitucionales.
El fallo de hoy despejó esa duda, confirmando que esas medidas drásticas están sustentadas en las necesidades de salud pública, más allá de las discusiones sobre la legalidad del aborto:
“Cuando se tiene que enfrentar una epidemia que amenaza la sociedad, el estado puede implementar medidas de emergencia que restringen derechos constitucionales, en tanto dichas medidas tengan alguna relación sustancial o real con la crisis de salud pública, y no vayan más allá de manera directa y evidente, invadiendo los derechos garantizados por la ley fundamental”, dijo la corte.