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Un consejo de Londres consulta a los residentes sobre la renovación de una controvertida zona de amortiguamiento del aborto.
El consejo de Richmond, en Londres, que tiene una Orden de Protección del Espacio Público (PSPO) alrededor de una clínica de abortos en Twickenham desde abril de 2019, admite que desde su implementación, «no ha habido violaciones conocidas de las restricciones en el área de la zona de amortiguamiento y no ha habido más peticiones, quejas o preocupaciones planteadas al Consejo«.
Sin embargo, a pesar de que ya existen leyes para prevenir la intimidación y el acoso, el Consejo está consultando a los residentes sobre la renovación de la zona de amortiguamiento por otros tres años.
La zona de amortiguamiento local existente o PSPO prohíbe «participar en cualquier acto de aprobación o desaprobación o intento de acto de aprobación o desaprobación, con respecto a temas relacionados con los servicios de aborto» y explícitamente incluye la oración y «cualquier forma de asesoramiento o interacción con residentes o clientes de BPAS en la calle».
La consulta les pregunta a los residentes si están de acuerdo o en desacuerdo con la propuesta de renovar la zona de amortiguamiento, si están de acuerdo o en desacuerdo en que la zona de amortiguamiento ha «sido efectiva para reducir el impacto perjudicial en la localidad» y si están de acuerdo o en desacuerdo en que si no se renueva la zona de amortiguamiento, las actividades prohibidas por la zona de amortiguamiento volverán y tendrán «efectos perjudiciales» en la localidad.
La consulta sobre la zona de amortiguamiento se cerrará poco después de que una mujer que había sido arrestada dos veces por rezar en silencio frente a una clínica de abortos recibiera una compensación de £13,000 en reconocimiento a su trato injusto.
Isabel Vaughan-Spruce presentó una demanda contra la Policía de West Midlands por dos arrestos y encarcelamientos ilegales; asalto y agresión en relación con un registro intrusivo de su persona; y por una violación de sus derechos humanos tanto con respecto a los arrestos como a las onerosas condiciones de fianza que se le impusieron.
Isabel fue arrestada por primera vez en noviembre de 2022 después de decirle a la policía que «podría» estar rezando en silencio mientras estaba parada en una calle pública cerca de una clínica de abortos en Birmingham. No tenía carteles ni expresión externa de opiniones políticas de ningún tipo. Estaba en completo silencio. Los oficiales de policía, que habían recibido una queja de un espectador, se acercaron a ella y comenzaron a preguntarle qué estaba haciendo.
Fue cacheada, arrestada y luego interrogada. La policía le mostró fotos de ella misma parada cerca de la clínica y le preguntó si estaba rezando. Isabel dijo que «podría» haber estado rezando, pero no podía recordar si estaba rezando en esos momentos específicos o si estaba pensando en algo más, como su almuerzo.
A pesar de que fue absuelta de todos los cargos en febrero de 2023, fue arrestada nuevamente, apenas unas semanas después, por presuntamente violar una Orden de Protección del Espacio Público (PSPO), que prohíbe las protestas frente a las clínicas de aborto dentro de un área designada.
Si bien Isabel ha recibido una disculpa y una compensación por el trato recibido a manos de la policía, se espera que otros dos miembros del público se enfrenten a juicio por presuntos delitos en zonas de amortiguamiento impuestas localmente. Se espera que un veterano militar, Adam Smith-Connor, que oró en silencio sobre su propio encuentro con el aborto cerca de una instalación en Bournemouth, se enfrente a juicio en el Tribunal de Magistrados de Poole. Una pensionista de Dorset, Livia Tossici-Bolt, también está siendo procesada por sostener un cartel dentro de una zona de amortiguamiento de la clínica de abortos que decía «Aquí para hablar si quieres».
La portavoz de Right To Life UK, Catherine Robinson, dijo: «La zona de amortiguamiento alrededor de la clínica de abortos en Twickenham se introdujo para abordar un problema para el cual ya existe legislación. Si el comportamiento de estas supuestas protestas es acoso, el Consejo no simplemente los movería más abajo en la calle, sino que querría detenerlos por completo. Cuando hay acoso e intimidación, se puede y debe prevenir con la legislación existente.
Lo que hacen estas zonas de amortiguamiento es criminalizar las ofertas de ayuda y alternativas al aborto. Es una discriminación directa basada en opiniones”.
Fuente: London council asks residents whether to renew controversial abortion buffer zone
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