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Por Clara María Merkowsky, en Life Site News.
CALGARY, Alberta (LifeSiteNews) — Los datos recientemente publicados indican que el número real de abortos causados por el cóctel de drogas Mifegymiso es mucho mayor que el número reportado de abortos químicos llevados a cabo en Alberta.
Según las estadísticas obtenidas por CTV News a través de una solicitud de acceso a la información, en 2022 y 2023, Alberta Health informó de 4.152 y 5.850 abortos químicos, respectivamente. Cabe destacar que estas cifras superan con creces los aproximadamente 3.000 abortos químicos registrados al año en la provincia por el Instituto Canadiense de Información Sanitaria (CIHI).
«Médico» es el término utilizado por los activistas pro-aborto para referirse a los abortos causados por drogas, también llamados abortos químicos. Los datos del CIHI habían encontrado originalmente que alrededor del 25 por ciento de los abortos de la provincia fueron químicos, o aproximadamente 3.000 abortos, entre 2020 y 2022.
El subregistro de abortos químicos no debería sorprender a los pro-vida, ya que grupos como Campaign Life Coalition han advertido repetidamente que las investigaciones sugieren que el uso de cócteles de drogas como Mifegymiso es mucho más común de lo que indican las estadísticas oficiales.
Incluso con cifras probablemente subestimadas, los datos de CIHI muestran que, cuando se incluyen los abortos químicos, más de 80,000 bebés no nacidos mueren en el útero en todo el país cada año.
Mifegymiso, que estuvo disponible para los canadienses en 2017, ahora es legal y gratuito en Alberta y otras provincias canadienses. El procedimiento, que implica el uso de dos medicamentos, se ha convertido en un método estándar para terminar con la vida de los bebés no nacidos menores de 10 semanas.
Durante un aborto químico con Mifegymiso, la madre embarazada primero toma una tableta del medicamento mifepristona. Este medicamento bloquea la progesterona de la madre, una hormona necesaria para mantener la pequeña vida nueva adherida a su pared uterina.
Sin progesterona, el mecanismo de mantenimiento del embarazo de la madre se apaga. La nueva vida ha terminado. Unas 24-48 horas después, la mujer ingiere por vía oral una tableta de misoprostol, que inicia poderosas contracciones uterinas que hacen que la mujer sangre abundantemente mientras expulsa a su bebé muerto.
De hecho, según la base de datos en línea de reacciones adversas de Canadá, una joven de 19 años, junto con su bebé, murió trágicamente después de usar las píldoras mortales.
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