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Becket Cook lo tenía todo para triunfar en Hollywood. Originario de Texas, se mudó a Los Ángeles para perseguir su sueño de ser actor y escritor. Con el tiempo, se convirtió en diseñador de producción, trabajando con importantes fotógrafos y en sesiones para revistas de moda como Vogue y Harper’s Bazaar. También vivía abiertamente como hombre gay, teniendo «una serie de relaciones con hombres durante los siguientes quince años», como él mismo comparte en su sitio web.
Sin embargo, una noche, mientras observaba a la multitud en una fiesta, Becket se cuestionó: «¿Es esto todo lo que hay en la vida? ¿Solo ir a fiestas por el resto de mi vida, es eso todo? ¿De eso se trata?«. Comenzó a sentirse abrumado por un profundo sentimiento de vacío.
Meses después, ya de regreso en Los Ángeles, Becket se encontraba con un amigo en una cafetería cuando entablaron conversación con dos hombres que estaban leyendo sus Biblias. Después de una charla de una hora, ellos compartieron el Evangelio con Becket y su amigo. Cuando Becket les preguntó sobre la postura de la iglesia con respecto a la homosexualidad, uno de ellos le dijo francamente que era pecado. Becket apreció su honestidad en lugar de esquivar la pregunta.
Al domingo siguiente, Becket asistió al servicio de la iglesia de aquellos hombres. El sermón del pastor cambió su vida. «Todo lo que decía, cada oración, cada palabra, resonaba como verdad en mi corazón y en mi mente, y no sé por qué», recordó Becket. «No quiero que deje el escenario. Quiero que siga predicando«.
Después, el pastor invitó a la gente a acercarse para recibir oración. Becket fue con uno de los líderes y le dijo: «No sé lo que creo, pero estoy aquí». Cuando el hombre oró por él, Becket sintió un profundo amor y se preguntó: «¿Cómo este hombre heterosexual me ama tanto?». Al regresar a su asiento, de repente Dios se le reveló. «Fue como si finalmente se abrieran las cortinas y pudiera ver la verdad y la realidad por primera vez en mi vida», explicó.
Desde ese momento, Becket dejó su estilo de vida homosexual y dedicó su vida a seguir a Dios. Ahora comparte su testimonio en iglesias y conduce el programa «The Becket Cook Show». Su objetivo es desafiar la narrativa cultural actual sobre la sexualidad, demostrando a través de su historia personal y las verdades bíblicas que la homosexualidad sigue siendo pecado, y que seguir a Cristo es infinitamente más satisfactorio y gozoso.
Becket detalla su increíble historia de redención en su libro de 2019: «Un cambio de afecto: la increíble historia de redención de un hombre gay«. Su caso demuestra que, con la gracia de Dios, una persona puede experimentar una transformación radical de toda su vida. De perseguir el éxito mundano y las relaciones homosexuales, Becket pasó a encontrar un propósito y satisfacción duraderos en Cristo.
Su testimonio también desafía la idea de que la orientación sexual de alguien está fijada de por vida. Becket vivió como homosexual durante 15 años, pero tuvo un encuentro con Dios que cambió completamente su atracción y estilo de vida. Esto revela que el poder redentor de Cristo puede llegar a lo más profundo del corazón humano y hacer nuevas todas las cosas.
La historia de Becket Cook transmite un mensaje de esperanza para cualquier persona insatisfecha con su presente, sea «straight» o «gay». Demuestra que el Evangelio tiene el poder para redimir, transformar y dar sentido pleno a esta vida. Al final, solo Jesús puede saciar esa sed de trascendencia que todos llevamos dentro.
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