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Una activista provida apelará la sentencia de cárcel que le fue impuesta por bloquear el acceso a una clínica abortista.
Bevelyn Beatty Williams, una conocida activista provida, anunció que apelará la sentencia de 41 meses de prisión que recibió por obstruir la entrada a una clínica abortista en 2020. Williams violó la Ley de Acceso a las Entradas de las Clínicas al impedir físicamente el acceso al establecimiento.
La activista, que es madre de una niña de dos años, calificó la sentencia como «devastadora» y expresó su preocupación por tener que separarse de su pequeña hija durante tres años.
«No solo esta fianza es excesiva para el delito cometido, sino que la jueza Jennifer Rochan dejó muy claro en la sala que me iba a poner como ejemplo», declaró Williams.
Bevelyn Beatty Williams
Williams inició una recaudación de fondos en GiveSendGo para cubrir los costos legales de la apelación. La jueza Rochan supuestamente le dijo, antes de emitir la sentencia, que ella era joven y que no estaría definida por la condena. Sin embargo, decidió conscientemente separarla de su hija durante 41 meses.
Por su parte, Damian Williams, Fiscal Federal del Distrito Sur de Nueva York, emitió un comunicado condenando a la activista. Declaró que «intimidó e interfirió repetidamente con personas que buscaban y proporcionaban servicios críticos de salud reproductiva. Lo hizo bloqueando físicamente el acceso a las clínicas, amenazando al personal y por la fuerza».
Específicamente, Bevelyn Williams fue acusada de obstruir la entrada a la clínica e impedir que una voluntaria ingresara. Mientras bloqueaba la puerta, según el tribunal, un miembro del personal intentó abrirla para la voluntaria y Williams se apoyó contra ella, lastimando la mano de la trabajadora.
Williams tuvo un pasado traumático antes de comenzar su ministerio. Fue abusada a una edad temprana, abandonó la escuela a los 15 años, consumió drogas, tuvo dos abortos y fue arrestada por lavado de dinero en un intento por pagar su alquiler. En la cárcel, conoció a una mujer que la inspiró a cambiar su vida y entregarse al Señor. Poco después, Williams comenzó a vivir su vida como cristiana y eventualmente sintió el llamado de iniciar un ministerio.
El ministerio de Williams, «En el Pozo», ofrece formación espiritual para los cristianos y ayuda física para los necesitados. Su declaración de misión es «evangelizar y ministrar dondequiera que Dios guíe para contarle a la gente sobre el amor de Jesucristo». Algunos de sus mandatos incluyen «predicar audaz, persistente e incesantemente el evangelio en las calles y en la plaza pública», «hablar, defender la vida y exigir que se prohíba el aborto» y «exigir rectitud y justicia a través de la agitación cultural y espiritual».
Williams continúa firme en sus convicciones a pesar de la dura sentencia y está dispuesta a apelar para defender el derecho a la vida de los no nacidos. Su caso demuestra que, a veces, defender principios conlleva grandes sacrificios personales. Sin embargo, para esta joven madre, ningún precio es demasiado alto para salvar vidas inocentes.
Fuente: Pro-life activist to appeal prison sentence for blocking abortion clinic
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