De acuerdo con los expertos, la más seria contendora para llevarse el Oscar a mejor actriz de reparto, sería Laura Dern, con su papel de ruda abogada de divorcios en la película de Netflix Marriage Story.
De acuerdo con el director, Noah Baumbach, Marriage Story pretende ser una historia de amor sobre el divorcio, en cuyo libreto se involucraron durante años el director y los actores con sus dramas personales, pues del reparto sólo el actor principal, Adam Driver, sigue junto a su esposa.
“Somos privilegiados en ser parte de la generación que va a redefinir lo que es una familia y de poder hacer historias de amor donde el final de la pareja no es un fracaso”.
– Laura Dern
Es una película muy interesante que puede ser analizada desde distintas perspectivas y que cuenta con las extraordinarias actuaciones de Scarlett Johansson y Adam Driver, en los papeles protagónicos de un matrimonio que intenta divorciarse de forma cordial, pero que poco a poco se va saliendo de madre bajo la influencia de una abogada de familia feminista y depredadora.
Una excelente representación del feminismo anticatólico que predomina en Hollywood
El punto culminante de la interpretación de Dern es un monólogo blasfemo y feminista, que sintetiza los reclamos de la mentalidad moderna contra el aporte moral y espiritual que el cristianismo ha hecho al mundo occidental, en especial, en relación con la familia y la dignidad de la mujer.
Un padre imperfecto es aceptable. El concepto de buen padre solo se inventó hace unos 30 años. Antes era normal que los padres fuesen callados, ausentes, poco fiables y egoístas. Claro que queremos que no sean así, pero en el fondo los aceptamos. Nos gustan por sus imperfecciones, pero la gente no tolera eso mismo en las madres. Es inaceptable a nivel estructural y espiritual. Porque la base de nuestra patraña judeocristiana es María, la madre de Jesús, que es perfecta. Es una virgen que da a luz, apoya incondicionalmente a su hijo y sostiene su cadáver al morir. El padre no aparece. Ni para echar un polvo. Dios está en el cielo. Dios es el padre y Dios no se presentó. Tú tienes que ser perfecta, pero Charlie (Adam Driver en la cinta) puede ser un puto desastre. A ti siempre te pondrán el listón más alto. Es una imbecilidad, pero es lo que hay”
– Monólogo de Laura Dern en Marriage Story
"El feminismo odia al Cristianismo porque todas las feministas en el fondo envidian a la mujer más grande de la historia: la Virgen María".
— Jesus V L (@jesus_vl) January 5, 2020
– Sara Winter, ex-líder de Femen Brasil, convertida en activista Pro-Vida.#LajeYWinterConNelly
Las debilidades del mundo artístico por las blasfemias anticristianas
La escena recibió un aplauso espontáneo del público durante su exhibición en los premios de la Academia de Cine Británica, los premios BAFTA, y fue tratada dentro de una entrevista hecha a Baumbach para los estudiantes de guión de la academia británica.
Según Baumbach, la escena fue inspirada por la misma actriz, quién quería transmitir la idea de que se encontraba en una “cruzada” a favor de las mujeres, y durante su grabación se esforzaron mucho en que transmitiera un sentimiento de furia creciente y espontánea.
También trabajaron en ese monólogo su actual compañera, Greta Gerwig, quien también es directora y está nominada a un Oscar por la película “Mujercitas”.
Teniendo en cuenta que son los creadores de la película quienes reconocen que esto es uno de los momentos más inspiradores y cargados ideológicamente, no se puede menos que reconocer lo revelador del espíritu moderno que resulta la película, pues deja ver cómo antes que tomar fuerza en un ideal o propuesta propia, su energía espiritual surge de aquello que odia: el modelo de vida cristiano.
Una película que definitivamente lleva el sello NETFLIX: