Sinopsis:
Jack Cunningham (Ben Affleck) es una antigua estrella del baloncesto que ha sido abandonado por su esposa y su familia, debido a la adicción que padece. Con el objetivo de equilibrar su alma y conseguir la salvación, Jack comienza a trabajar como entrenador del equipo de baloncesto de su instituto. El conjunto está formado por jugadores de diferentes razas que no parecen estar lo suficientemente coordinados como para conseguir resultados positivos.
La película está dirigida por Gavin O’Connor y escrita por Brad Ingelsby y el mismo O’Connor. Las reseñas de la crítica y los espectadores han sido mayoritariamente positivas, destacando especialmente la buena actuación de Ben Affleck.
¿Por qué vale la pena ver The Way Back de Ben Affleck?
Aunque el escenario de fondo se encuentra en la hazaña de convertir un equipo de baloncesto escolar acostumbrado a perder, en un equipo ganador y con confianza en sí mismo, la película aprovecha que se trate de un colegio católico para transmitir un mensaje ético positivo: más importante que ganar, es el jugar con honestidad e integridad, siendo capaces de dar siempre lo mejor de sí mismos.
También muestra de positivamente una actitud propia de la educación católica tradicional, que radica en que la educación es un proceso que ocurre dentro de una relación humana, que comienza con el testimonio personal.
Este es un aspecto muy controversial en la sociedad contemporánea, en donde se tiende a pensar que la educación consiste en la transmisión de contenidos y habilidades, de una especie de entrenamiento que se logra a través de medios técnicos, cuyo éxito radica en la sofisticación de las metodologías , mientras que la vida personal de los educadores sería algo aparte e íntimo, que no tiene porqué tener trascendencia alguna en el proceso educativo.
De modo que lo típico de Hollywood habría sido mostrar como un villanos a las autoridades escolares que le exigen integridad el protagonista, debido al impacto que su ejemplo tiene en los estudiantes.
Por el contrario, en la película se muestra esa tensión entre el protagonista, Jack Cunningham (Ben Affleck), y las autoridades católicas del colegio (sacerdotes y laicos) dejando en claro que actúan con paciencia, buena fe y, sobre todo, movidas por una verdadera caridad cristiana.
En conclusión, The Way Back es una película inspiradora que muestra la fe católica como una fuerza capaz de reconfortar, de guiar positivamente la vida de los más jóvenes y de orientar a aquellos que andan en busca de sentido.
Contenidos con valoración ética:
La película no tiene escenas de contenido sexual, ni particularmente violentas, y aunque usa constantemente un lenguaje vulgar, también ofrece una crítica negativa del mismo, resaltando la importancia del lenguaje en la integridad moral de una persona.
Conductas de riesgo: la película retrata la vida de un alcohólico que lucha por recuperar su camino en la vida, por lo cual la referencia al consumo de alcohol a lo largo de la película es evidente.
En cuanto a la promiscuidad, apenas se sugiere la disposición del protagonista de caer en esa tentación, justo en el momento de mayor frustración y desesperanza, aunque las circunstancias impiden que algo llegue a suceder realmente.
Relaciones familiares: se muestran de forma positiva, como una fuente constante de apoyo, solidaridad e inspiración, así como se hace evidente el daño y el dolor que pueden tener los errores que cometemos con quienes más nos aman, en especial en el matrimonio.
La importancia de la relación padre – hijo y como esta puede marcar el destino de una persona, es un mensaje que está presente en la película, así como la idea de que a pesar de parezca imposible, vale le pena intentar sanarla cuando esta relación está rota.
La fe católica es representada de manera respetuosa y con inteligencia, sin ser la protagonista principal de la historia, sí como un elemento circunstancial muy positivo.
Es una película inspiradora con un mensaje de redención, la cual pasa a través de la búsqueda de sentido, del salir de uno mismo y darse a los demás, y en ese proceso se puede ir sanando las heridas personales.
El drama familiar es particularmente conmovedor, mostrando que aunque un matrimonio se haya desintegrado, la solidaridad puede persistir y es necesario tratar de sanar las heridas causadas tanto por los errores personales como por las circunstancias difíciles que se presentan en la vida.
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