En algunos países y ciudades cierran templos, no celebran la Santa Misa y hasta prohíben la Comunión. Mientras tanto, los bares y centros comerciales y demás negocios permanecen abiertos y sin restricciones. Producen perplejidad las medidas tomadas por algunos obispos y sacerdotes. La Eucaristía, Dios, el Señor Jesús vivo y presente en ella, es el corazón de nuestra Fe y de nuestra Iglesia, y el culmen de la vida cristiana. En este video, el sacerdote lo dice todo, y muy claro. ¡Nada qué agregar!
«La Iglesia no es el Ministerio de Salud… Su función es que no mueran las almas».