El senador populista de Vermont , que habló el día después de que fue derrotado por el ex vicepresidente en Michigan, Missouri, Mississippi e Idaho y se quedó más atrás de Biden en la carrera crucial para los delegados de la convención demócrata, se comprometió a presionar al ex vicepresidente Biden como líder en el enfrentamiento de horario estelar de este fin de semana con una serie de preguntas progresivas sobre políticas.
Sanders prometió el miércoles permanecer en la carrera de nominación presidencial demócrata , enfatizando que “el domingo espero con ansias el debate en Arizona con mi amigo Joe Biden “.
Pero si uno lee entre líneas el breve discurso de Sanders de 10 minutos, parecería que esta estableciendo los términos para su próxima salida de la carrera al establecer marcadores para que Biden los acepte, y abrace al progresista socialista democrático, como se describe a sí mismo con su agenda y con un compromiso con los votantes más jóvenes que han impulsado las dos campañas presidenciales de Sanders.
“Bernie Sanders claramente está colocando un marcador para Joe Biden sobre el que lo presionará para que brinde respuestas”, señaló el veterano estratega demócrata Zac Petkanas.
“La pregunta que aún está en el aire es si Sanders está probando una hoja de ruta para Biden o va a usar esos temas como un martillo para debilitar a Biden. Creo que vamos a obtener una respuesta a eso en el debate del domingo “. Dijo Petkanas.
Sanders, cuyas posibilidades de ganar la nominación se están evaporando rápidamente, reconoció que está perdiendo el argumento de la elegibilidad ante Biden, pero declaró que ganó el “debate ideológico”. Y promocionó el atractivo de su mensaje progresista y criticó al ex vicepresidente por no conquistar los votantes más jóvenes.
El próximo calendario de primarias parece empeorar las cosas para Sanders ya que su ventana para la nominación continúa cerrándose. Los grandes estados de Florida, Illinois, Ohio y Arizona celebran primarias el próximo martes, seguidos una semana después por Georgia. Sanders perdió los cinco estados en la carrera demócrata de 2016 ante la candidata Clinton.
Las últimas encuestas de opinión pública en Florida y Arizona, realizadas después del Súper Martes pero antes de las impresionantes victorias de Biden de esta semana, indicaron que el ex vicepresidente tenía grandes ventajas de dos dígitos sobre Sanders.
En el último recuento, Sanders había deslizado aproximadamente 150 delegados detrás de Biden, y es extremadamente difícil para el senador recuperar ese terreno en las próximas competencias.