Por Lianne Laurence | Life Site News | Jue Mayo 21, 2020
TORONTO, 21 de mayo de 2020 (LifeSiteNews) — El grupo pro-vida más grande de Canadá está advirtiendo a los obispos y fideicomisarios católicos del país que la prohibición del gobierno de Trudeau de la llamada “terapia de conversión” para menores criminalizará el asesoramiento basado en la enseñanza católica, y podría convertirse en un delito enseñar la moral sexual católica en las escuelas católicas.
La Iglesia Católica enseña que los actos homosexuales son intrínsecamente y objetivamente desordenados, y que la ideología de género se opone al plan de Dios para la sexualidad humana y a Su creación del hombre como hombre y mujer.
En un video recientemente publicado, Campaign Life Coalition también renovó su súplica a los obispos para que expresaran su oposición al proyecto de ley C-8, que el ministro de Justicia David Lametti presentó en la Cámara de los Comunes en marzo.
“El silencio no es una opción. La jerarquía de la Iglesia debe hablar”,
dijo el presidente de Campaign Life, Jeff Gunnarson.
“El silencio de los obispos va en detrimento de todos los cristianos y de todas las personas de fe, no sólo de los católicos, porque otras tradiciones de fe se verán afectadas negativamente por la ley totalitaria”,
agregó Gunnarson.
El proyecto de ley C-8 añade cinco nuevos delitos al Código Penal. Será un delito punible con hasta cinco años de prisión: 1) causar que un menor se someta a terapia de conversión, 2) retirar a un menor de Canadá para someterse a terapia de conversión, 3) causar que una persona se someta a terapia de conversión contra su voluntad.
Lo convertirá en un delito castigado con hasta dos años de prisión a: 4) beneficiarse de la terapia de conversión, y 5) anunciar la terapia de conversión.
El proyecto de ley C-8 define la “terapia de conversión” como “una práctica, tratamiento o servicio diseñado para cambiar la orientación sexual de una persona a la identidad heterosexual o de género a cisgender, o para reprimir o reducir la atracción no heterosexual o el comportamiento sexual”.
Añade: “Para mayor certeza, esta definición no incluye una práctica, tratamiento o servicio que se relacione (a) con la transición de género de una persona; o b) a la exploración de su identidad o a su desarrollo por parte de una persona”.
A pesar de que los liberales de Trudeau han reducido la edad de consentimiento para el sexo anal a 16 años de edad, definen a un “menor” en el proyecto de ley C-8 como menor de 18 años de edad.
En el video coproducido por Campaign Life y LifeSiteNews, el personal de Campaign Life Clinton Somerton explicó que C-8 afectará a “nuestras escuelas separadas católicas basadas en la fe”.
Eso es debido a la influencia generalizada del activista LGBTQ basado en Edmonton Dr. Kristopher Wells, quien ha estado presionando a todos los niveles del gobierno para que prohíban la “terapia de conversión”, dijo.
“Para conocer la intención exacta de esta legislación federal por Justin Trudeau y el Senado nombrado por los liberales, y donde su autor pretende que sus tentáculos lleguen en el futuro, sólo necesitamos leer las palabras de Kristopher Wells”, dijo Somerton.
Wells es conocido por su activismo homosexual. Como director del Instituto de Estudios y Servicios de Minorías Sexuales de la Universidad de Alberta, creó el sitio web del gobierno de Alberta NDP sobre Alianzas Gay-Straight destinadas a estudiantes de K-12.
El sitio incluía notoriamente enlaces a material sexualmente gráfico, como anuncios de juguetes sexuales, videos de hombres que participaban en prácticas sadomasoquistas homosexuales, y consejos para “pagar por el porno”.
Wells también ha compartido material sexualmente explícito en las redes sociales, ha promovido una caricatura comparando cristianos con nazis, defendido actos sexuales públicos, burlado públicamente correspondencias privadas de los padres y promovido diversos materiales que fomentan gráficamente la experimentación sexual entre menores.
Actualmente la Cátedra de Investigación de Canadá para la Comprensión Pública de la Juventud Sexual y de Género de la Universidad MacEwan de Edmonton, Wells más recientemente estuvo involucrada en los planes del ayuntamiento de Calgary para implementar lo que los críticos dicen que es una prohibición excepcionalmente peligrosa, como Jonathan Van Maren informó esta semana.
Y en su manifiesto publicado empujando las prohibiciones municipales de “terapia de conversión”, Wells deja claro que tiene la intención de criminalizar la enseñanza católica como una forma de “terapia de conversión”, señaló Somerton.
Wells escribe:
Las formas modernas de terapia de conversión todavía están sucediendo en Canadá, particularmente en algunas escuelas católicas [sic] y basadas en la fe, que a menudo ocurren bajo el pretexto de “enfoques pastorales para el cuidado”. Muchos de estos enfoques se niegan a permitir o aplicar restricciones a las alianzas homosexuales y rectas (GSA), se refieren a los estudiantes LGBTQ2 como “personas con atracciones del mismo sexo”, sugieren que los jóvenes transgénero y no binarios están siendo influenciados por una llamada “ideología de género”, y promulgan políticas que llaman a los jóvenes LGBTQ2 a vivir vidas castarias.
Lo que es común con todas estas prácticas es cómo niegan fundamentalmente la identidad LGBTQ2 y reafirman la creencia de que las personas LGBTQ2 están rotas, desordenadas o dañadas. … Estas acciones operan bajo la misma premisa que la terapia de conversión, que niega una identidad LGBTQ2 sana y feliz y se esfuerza por cambiar o suprimir la orientación sexual, la identidad de género o la expresión de género de una persona como si fuera algo inmoral, pecaminoso o contagioso que necesita ser manejado o contenido. …
Estas prácticas modernas de terapia de conversión tienen el efecto deseado de hacer que los estudiantes LGBTQ2 sean silenciosos, invisibles y vulnerables dentro de sus entornos escolares (sin cursivas en el este).
“Wells y sus aliados transhumanistas entienden a fondo y pueden ver a través del lenguaje débil del llamado enfoque de ‘Lente Católica’ para lidiar con la embestida ideológica LGBT de los últimos años”, observó Somerton.
Según la visión de Wells, el Apostolado de Valor, un ministerio católico de 12 pasos que ayuda a los católicos atraídos por el mismo sexo a vivir vidas castas de acuerdo con la enseñanza de la Iglesia, sería prohibido como “terapia de conversión”.
Bajo C-8, llevar a un menor a una reunión de Valor sería considerado un crimen castigado con hasta cinco años de cárcel, y publicitar Courage un crimen castigado con hasta dos años de cárcel.
LifeSiteNews se comunicó con la Conferencia Canadiense de Obispos Católicos para preguntar si los obispos emitirían una declaración sobre el proyecto de ley C-8, pero estos no se enteraron antes de la fecha límite.
Campaign Life ha enviado a todos los obispos de Canadá un enlace al video, e insta a los católicos a ponerse en contacto con su obispo para pedirle que se oponga categóricamente al proyecto de ley C-8.
Para obtener información de contacto sobre los obispos católicos, visite la Conferencia Canadiense de Obispos Católicos aquí.
Campaign Life también ha lanzado una petición contra la legislación, que se puede encontrar aquí.
Fotografía del encabezado: El primer ministro Justin Trudeau lleva una bandera canadiense desfigurada con la marca arco iris del movimiento homosexual en el Desfile del Orgullo Gay de Toronto.
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