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Declaración de 170 obstetras/ginecólogos en respuesta al fallo que revocó el caso Roe vs. Wade
Un grupo de 170 obstetras y ginecólogos publicó recientemente una declaración en respuesta a la que hicieron 900 profesores de obstetricia y ginecología tras la anulación de Roe vs. Wade.
En su declaración, los 900 profesores pedían restablecer la protección federal al aborto, argumentando que con la decisión Dobbs la Corte Suprema había retirado el «derecho constitucionalmente protegido al aborto». Afirmaban que esto había dañado la vida y la salud de las pacientes, así como la capacidad para entrenar a futuros médicos en este «cuidado médicamente necesario y basado en evidencia».
Los 170 obstetras que respondieron encuentran mucha desinformación en la declaración de los 900 profesores. Señalan, por ejemplo, que el aborto nunca fue un derecho constitucional y que la decisión Dobbs simplemente devolvió a los legisladores la capacidad de considerar los derechos tanto del ser humano en gestación como de la mujer embarazada.
Sobre la autonomía de la paciente, los 170 médicos afirman que ésta nunca es absoluta. Una mujer no tiene autonomía para que le amputen un brazo sano, por ejemplo. En el aborto no solo se vulnera la autonomía del feto, sino también el principio de no maleficencia [“Primum non nocere”], ya que se le da muerte.
En cuanto a la mortalidad materna, no hay evidencia de que el aborto sin restricciones la disminuya. De hecho, países con políticas muy restrictivas sobre el aborto tienen tasas mucho más bajas de mortalidad materna que Estados Unidos.
Los 170 obstetras también rechazan que las restricciones al aborto afecten desproporcionadamente a las minorías y personas de bajos ingresos. Por el contrario, señalan que el aborto mata de manera desproporcionada a fetos de raza negra. Desde Roe vs. Wade se han eliminado 16 millones de fetos negros mediante el aborto.
Finalmente, los 170 médicos señalan que la mayoría de los obstetras en ejercicio no realizan abortos ni derivan a sus pacientes para que se los realicen. Es falso que el aborto sea necesario para proporcionar un cuidado basado en evidencia. De hecho, poder evacuar el útero cuando la vida de la madre peligra no requiere para nada de abortos por desmembramiento.
Los 170 obstetras concluyen invitando a los 900 profesores a trabajar con ellos para promover prácticas basadas en evidencia, como desalentar la compra de fármacos abortivos por internet y promover el uso de ultrasonido antes de un aborto.
[¿Cuántos médicos y personal de los llamados “profesionales de la salud” viven –económicamente– de estás ‘prácticas’?].
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